|Por Ailín Colombo
“Si pudieron evitarse, no son accidentes: son asesinatos laborales”, sostienen desde el Espacio Basta de Asesinatos Laborales (BAL). La organización, que desde el 2018 releva casos de muertes por desidia y/o negligencia patronal, presentó su último informe el pasado viernes en Capital Federal y Mar del Plata de manera simultánea. El registro arrojó que durante el 2021 y el 2022 murieron 3822 trabajadores y trabajadoras por causas laborales.
Se trata de 3330 muertes en 2021 (incluyendo las provocadas por Covid) y 492 en 2022. BAL resalta en su informe que estas muertes “son el resultado de un entramado productivo cuya ganancia se obtiene no sólo de la explotación de nuestra fuerza de trabajo, sino también de lo que las patronales “ahorran” en nuestras condiciones laborales. Son inherentes a la lógica de la producción capitalista”.
En las cifras incluyen no sólo la muerte de trabajadores en sus puestos laborales, sino también las producidas por enfermedades profesionales, entre ellas el Covid, no listada por las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART). En el 2021, el 87,8% de las muertes se produjeron por coronavirus. Además, los rubros con mayor cantidad de casos, exceptuando los de covid, son el del transporte con más de un 22% y el de la construcción, con 16,5%.
Oscar Martínez, integrante del Taller de Estudios Laborales, remarcó que el informe es sólo “la punta del iceberg”, ya que, aunque incluyen estos casos, hay una gran dificultad para relevar las muertes de trabajadores no registrados y los producidos por enfermedades laborales. También explicó que las principales causas de muerte son traumatismo, fractura y caídas, lo que da cuenta que “no hay inversión en medidas de seguridad”, concluyó.
Por otro lado, BAL resaltó que “según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades laborales causan entre el 70% y el 80% de las muertes relacionadas con el trabajo en el mundo”. Sin embargo, en Argentina, las ART estiman que causan sólo el 3% de los casos. “Hay un subregistro de enfermedades laborales y la mayoría de las denuncias hechas a la ART son rechazadas”, explicaron.
La Superintendencia de Riesgos del Trabajo, ente estatal encargado de registrar los mal llamados “accidentes laborales”, cuenta con cifras mucho menores que BAL. Desde la organización explican que se debe a que sólo trabajan con los datos arrojados por las ART, así como no consideran a las muertes de trabajo informal y a muchas de las enfermedades profesionales.
BAL está conformado por familiares de víctimas de asesinatos laborales y trabajadores/as de diversos sectores: delegados y trabajadores de la Línea 60; Junta Interna de ATE INTA; Lista Roja del Neumático; docentes de Suteba Tigre; Agrupación Luis Pons de Trabajadores Municipales de Avellaneda; Colectivo de cine militante Silbando Bembas; Taller de Estudios Laborales; Trabajadores de CNEA, Espacio Sindical de Base de Mar del Plata.